sábado, 9 de junio de 2012

Ensayo: Aprender a Aprender

La reconceptualización de los procesos pedagógicos en nuestro país, iniciada a partir del decenio de 1980 con los aportes del Movimiento Pedagógico Nacional, ha demostrado que se puede desarrollar un proceso educativo que dé cuenta de la formación integral de los educandos. Considerar las actitudes y las aptitudes de quienes aprenden es un elemento clave para ejecutar acciones didácticas que promuevan un aprendizaje en la vida y para la vida.

Han sido los principios del modelo pedagógico constructivista el eje rector que ha fundamentado la transformación de las acciones educativas al interior de la escuela, privilegiando el desarrollo de las habilidades de pensamiento de cada estudiante, es decir, su capacidad de comprensión para solucionar eficazmente un problema, aportando toda su creatividad. Ha sido una invitación al reconocimiento de cada estudiante como ser humano para que éste reflexione, ejerza su actitud crítica y su capacidad para tomar decisiones de una manera consciente y responsable sobre los conceptos, experiencias, hechos y situaciones que definen su existencia cotidiana.

Una existencia cotidiana que no responde solamente a los procesos culturales, económicos, políticos y sociales de su entorno local sino a los requerimientos de una aldea global que cada vez es más pequeña, ya que los conceptos de tiempo y espacio se acortan cada vez más gracias a los avances científicos y tecnológicos. Ser participes en esta comunidad global requiere que el estudiante tome conciencia de sus procesos de aprendizaje, sea capaz de auto cuestionarse sobre lo qué aprende y cómo lo hace, de identificar sus procesos de comprensión y análisis como estrategias de aprendizaje que lo orienten en la construcción de su propio conocimiento del mundo que le rodea.

El estudiante, bajo este paradigma educativo, deja de ser una tabla rasa que va a la escuela a ejercer una función pasiva en espera de que un maestro le transmita ese saber para recitar unos contenidos académicos que den cuenta de su humanización e integración a una sociedad civilizada, para convertirse en un ser pensante capaz de potenciar su propio desarrollo humano, sobre la base de herramientas y estrategias que le permitan aprender a aprender. Un aprender a aprender que implique, de acuerdo con Frida Díaz, “el uso de estrategias flexibles y apropiadas que se transfieren y adaptan a nuevas situaciones.”[1]

Por lo tanto, este proceso de aprender a aprender no sólo le otorga un sentido y pertinencia al reconocimiento de las propias habilidades cognitivas de cada estudiante sino que también le da sentido y configura la realidad externa en la que se circunscriben sus acciones como ser humano. Es justamente la combinación de estos dos elementos lo que permite la transformación, el cambio; la conciencia de que cada día se puede ver e interpretar el mundo que le rodea desde diferentes visiones, le permite enriquecer sus estructuras mentales para saber organizar la información que recibe, seleccionarla y usarla para resolver sus tareas cotidianas tanto en la escuela como fuera de ella. De esta manera, se educa en la autonomía, la independencia y el juicio crítico.

Visto de esta manera, las estrategias que el escolar use para descubrir la forma cómo aprende lo invitan a adentrarse en una aventura guiada por la reflexión crítica de sus propias acciones y hechos, llevándolo a profundizar en la exploración y conocimiento de su propia personalidad. Ante esta condición sine qua non para que se desarrollen las habilidades de aprender a aprender es necesario reconocer que tanto el estudiante como el maestro “son seres de este mundo, resultado de una historia, cultura y tradiciones particulares que no escogieron consciente ni libremente, y que constituyen el punto de partida para todo nuevo conocimiento y el horizonte imprescindible para toda nueva comprensión.”[2]

Una comprensión basada en la flexibilidad del conocimiento que permite “aprender a vivir en medio de las incertidumbres que nos depara la realidad, sin miedo a los riesgos que implica innovar.”[3] En consecuencia, la comprensión se presenta cuando la gente puede pensar y actuar flexiblemente con lo que sabe, siendo consciente que el saber está por hacerse, es decir, que tanto el maestro como el estudiante construyen y reconstruyen ese conocimiento con base en sus experiencias de vida, las cuales son situacionales, únicas e irrepetibles.

Dicha construcciones y reconstrucciones de conocimiento surgen subjetivamente a partir del diálogo entre los actores inmersos en ese proceso de develar las formas de aprender a aprender a través de una relación dialéctica que propicia la intersubjetividad. Para el estudiante significa la oportunidad de elaborar su propio conocimiento, de construirlo, percibirlo y reacomodarlo a sus esquemas previos. Para el docente se constituye en un reto de innovación pedagógica en cuanto desarrolla estrategias que le permitan a los estudiantes considerar la importancia y necesidad de estudiar el objeto para poder apreciar sus características, determinar sus componentes e interpretar los principios que lo integran y lo distinguen. Sólo así, cada estudiante será capaz de integrar este nuevo saber a sus estructuras cognitivas y cognoscitivas para aplicarlo en la resolución de problemas que le presenta la vida cotidiana.

No obstante, esas soluciones serán factibles, fiables y válidas si son el resultado de un proceso, es decir, si mediante una secuencia consciente y organizada de acciones afectivas, mentales, psicomotrices y volitivas que construyan destrezas, habilidades, hábitos y valores con el objeto de superar el conflicto cognitivo que genera cada nueva situación que estimula el aprendizaje.

Sólo mediante un proceso de enseñanza – aprendizaje orientado a partir de procesos se desarrolla una verdadera educación centrada en el valor del ser humano, cuyos objetivos son, de acuerdo con Víctor Beltrán Corona:

“…los de favorecer en el alumno el desarrollo integral de su personalidad, que sea flexible para adaptarse a las circunstancias cambiantes de su vida, que sea capaz de dirigirse a sí mismo, que sea capaz de ser y no sólo de hacer, que sea creativo y transforme en su mundo aquello que esté a su alcance, que sea capaz de una crítica reflexiva, realista y propositiva, que aprenda a aprender de todas sus experiencias, que viva en un proceso de descubrimiento de los conocimientos y habilidades necesarios para resolver los problemas a los que se vaya enfrentando, que respete el medio ambiente, que mejore sus relaciones interpersonales con los demás y que colabore y coopere con otros seres humanos, respetándolos en su propia individualidad.”[4]

Finalmente, se puede afirmar que el reconocimiento de cada estudiante como ser humano capaz de reflexionar, ejercer su actitud crítica y su capacidad para tomar decisiones de una manera consciente y responsable sobre los conceptos, experiencias, hechos y situaciones que definen su existencia cotidiana no constituye solamente una respuesta a las exigencias de la sociedad contemporánea que exige la formación de hombres y mujeres reflexivos, analíticos, autónomos, críticos, capaces de apropiarse no solo de conocimientos específicos, sino también, a un proceso de formación en la vida y para la vida que le otorgue su verdadero sentido humano al brindarle verdaderas estrategias para aprender eficazmente, que le permitan asimilar y gestionar sus propios aprendizajes a lo largo de toda su existencia en esta pequeña aldea global.

[1] DÍAZ B., Frida. Estrategias Docentes para el Aprendizaje Significativo. Caracas: Mc Graw Hill, 2001. p. 114. Citado por: FLORELIZ, Alfonzo. Aprender a Aprender en un Mundo Global y Diverso. (15 de abril de 2012). (Vía Internet). http://www.natureduca.com/blog/?p=236

[2] SERVICIO NACIONAL DE APRENDIZAJE, Santander. Cognición y Aprendizaje: La Comprensión. (12 de abril de 2012). (Vía Internet). http://sena.blackboard.com/webapps/blackboard/execute/displayLearningUnit?course_id=_185146_1&content_id=_12987342_1

[3] SENA, Santander. Cognición y Aprendizaje: Aprender a Aprender. (12 de abril de 2012). (Vía Internet). http://sena.blackboard.com/webapps/blackboard/execute/displayLearningUnit?course_id=_185146_1&content_id=_12987304_1

[4] BELTRAN CORONA, Víctor. Se está gestando una revolución de modelos académicos. (18 de abril de 2012). (Vía Internet). http://www.anuies.mx/servicios/p_anuies/publicaciones/confluencia/96/7.htm

Procesos Pedagógicos


Los procesos educativos llevados a cabo en el interior de cada comunidad son procesos que se desarrollan a partir de la transmisión de conocimientos, costumbres, formas de actuar y valores, con el propósito de permitir la vinculación y concienciación cultural, conductual y moral de las nuevas generaciones en el seno de la sociedad que permite su desarrollo humano. Es mediante la educación que las niñas, los niños, las y los adolescentes y jóvenes asimilan la cosmovisión de las generaciones anteriores, sus conocimientos, sus modos de ser, sus normas de conducta, identificándose con ellas y acomodándolas a sus estructuras cognitivas para crear nuevas formas de conocimiento que den cuenta de su manera de ver e interpretar el mundo que les rodea.

Este proceso de socialización formal de los individuos de una  sociedad incentiva el proceso de estructuración del pensamiento, de la imaginación creadora, las formas de expresión personal y de comunicación verbal y gráfica. En consecuencia, las facultades educables de los seres humanos no sólo responden al desarrollo de procesos mentales y psicomotrices, sino también de los procesos afectivos y volitivos.

En este contexto la inteligencia ha dejado de ser algo innato, para considerarla una habilidad que puede ser aprendida, en consecuencia, los nuevos paradigmas educativos la consideran como la capacidad de relacionar conocimientos para resolver una determinada situación. En palabras de Howard Gardner, se define la inteligencia como la “capacidad intelectual del hombre para resolver :los problemas o dificultades que encuentre... encontrar o crear problemas estableciendo las ases para la adquisición de nuevo conocimiento... la creación de nuevos productos o planteamientos de nuevas preguntas."[1]

La pertinencia del concepto expuesto en el proceso de enseñanza – aprendizaje implica que la adquisición o modificación de conductas, conocimientos, destrezas, habilidades o valores como resultado del estudio, la experiencia, la instrucción, la observación y el razonamiento no se basa en su totalidad en el desarrollo de las aptitudes lingüísticas y lógico-matemáticas, sino en otras destrezas o habilidades que el propio Gardner ha propuesto en su teoría de las inteligencias múltiples y que ha venido a fundamentar la nueva visión del proceso educativo, a saber, la formación integral de las y los educandos.

Para Gardner además de las inteligencias lingüística y lógico-matemática, existen la inteligencia cenestésico-corporal, espacial, interpersonal, intrapersonal y musical. En la medida en que los educadores se apropien de las orientaciones conceptuales propuestas por el psicopedagogo estadounidense se ejecutarán prácticas pedagógicas que desarrollen el aprendizaje significativo.

Un aprendizaje significativo que reconozca los saberes previos de cada ser humano para que él como sujeto responsable y consciente de sus procesos de aprendizaje identifique la pertinencia de lo que aprende y le otorgue un sentido dentro de sus experiencias personales de vida. Mediante este aprendizaje se produce una interacción entre lo que ya el individuo conoce o sabe y las nuevas estructuras cognitivas con el fin de que los nuevos conceptos, ideas y proposiciones se integren en sus esquemas cognitivos de un modo no arbitrario y sustancial, favoreciendo la diferenciación, evolución y estabilidad de los subsunsores (conceptos relevantes) pre existentes y consecuentemente de toda la estructura cognitiva.

En este punto de la praxis pedagógica el docente debe contar con estrategias que le permitan al educando pensar, reflexionar sobre lo que ya sabe, las ideas, proposiciones, estables y definidas, en sus estructuras mentales de tal manera que pueda establecer una relación con aquello que debe aprender y con los cuales la nueva información pueda interactuar. En consecuencia, el uso de métodos, técnicas y medios didácticos apropiados permitirá una adecuada adquisición, almacenamiento y/o utilización de la información.

No obstante, durante la preparación de una actividad pedagógica que busque desarrollar un aprendizaje significativo no es válido considerar solamente el punto de vista de quién educa y de las estrategias que puede usar para desarrollarlo, se hace necesario considerar que la pertinencia que haga el maestro de las actividades u operaciones mentales para facilitar la adquisición del conocimiento deben responder a las necesidades e intereses de quien educa. El estudiante marca unas pautas de aprendizaje que se hacen necesarias tener en cuenta durante la praxis didáctica. Esto nos lleva a considerar que el reconocimiento de esos estilos de aprendizaje no se convierte en una herramienta para clasificar a los estudiantes, sino que se convierte en un eje de apoyo para ejecutar acciones pedagógicas que induzcan al estudiante a decidirse en la construcción de su aprendizaje, haciéndolo con entusiasmo.

Al respecto, Robert Smith plantea en su libro Learning How to Learn que los seres humanos "diferimos en la forma en que abordamos las actividades relacionadas con el aprendizaje. Somos diferentes en la forma de pensar, de resolver problemas... en la forma en que procesamos la información".[2]

Lo expuesto no significa que el punto de vista del docente y del estudiante sobre el proceso de aprendizaje chocan, simplemente son maneras de ver la realidad que se complementan y que permitirán el la creación de un contexto educacional agradable y motivante en el que las y los estudiantes comprendan de una manera factible, fiable y válida lo que están aprendiendo.

El objetivo final de este aprendizaje significativo es utilizar lo aprendido en nuevas situaciones, en un contexto diferente. Esto se conoce como transferencia, de ahí la importancia que se concede al desarrollo de aprendizaje por procesos. Una secuenciación consciente y organizativa de las acciones afectivas, mentales, psicomotrices y volitivas conduce a la construcción de destrezas, habilidades, hábitos y valores que permitan potenciar el desarrollo humano y la adquisición de los conocimientos necesarios para la construcción de la propia personalidad.

El proceso de transferencia es un proceso sintético en cuanto el educando es capaz de interpretar, valorar y transformar la realidad, de una manera original y creativa, para descubrir y construir definiciones, leyes, principios y patrones de comportamiento. Son estos últimos los que constituyen la escala de valores humanos personales que le permitirán decidir, elegir y obrar por motivos racionales antes que por emociones o pasiones.

Es por ello que la escuela de hoy, si realmente busca la formación integral de sus estudiantes, no puede olvidar que hay que educar las emociones. Esto significa que se debe exigir una disciplina formativa, con base en los valores de la armonía, el control, el equilibrio, la estabilidad y la racionalidad. Sólo mediante un dominio racional de las emociones, acompañado de la conceptualización, la comprensión y el análisis de los hechos, estas reacciones intensas y transitorias de la afectividad no dominarán la conducta humana, y se evitará que se pueda producir en un momento dado un retorno a los instintos primarios del ser humano.

Así mismo, se debe reconocer el origen de las pasiones que buscan satisfacer las tendencias profundas y naturales del ser humano. Hay que enseñar que no sólo es la satisfacción y beneficio personal, sino también la consideración de los aspectos objetivos, el beneficio y la satisfacción de los demás y de la naturaleza. En consecuencia, se evitará llevar las pasiones al extremo y se educará en el control consciente del origen de todas las inclinaciones, reacciones humanas.

En este sentido, se considera que el objetivo de la inteligencia emocional es “inculcar actitudes esencialmente humanas con la conciencia de la propia persona, el autodominio y la empatía, y el arte de escuchar, resolver conflictos y cooperar.”[3]

El estudiante con estas herramientas afectivas, intelectuales, psicomotrices y volitivas está en capacidad de desarrollar una "inteligencia general" que no reduzca ni totalice la emergencia de hechos u objetos multidimensionales, interactivos y con componentes aleatorios o azarosos que ocurren dentro del contexto de una concepción global.

Se trata de desarrollar un proceso educativo que tenga en cuenta la complejidad, “lo que está tejido en conjunto”, que permita la unión, reunión, relacionan y abordar los procesos en su constante dinamismo y cambio. Aquí juega un papel importante la transversalidad en cuanto los objetos de aprendizaje que se han de conceptualizar, analizar y comprender no son el resultado de una determinada disciplina del saber humano, sino del aporte que en mayor o menor se puedan hacer entre disciplinas para confrontar una tesis y una antítesis, conduciendo a la formación de estructuras intelectuales, afectivas y volitivas.

Enseñar bajo los paradigmas del pensamiento complejo es enseñar en la búsqueda continúa de unos criterios de conocimiento, factibles, fiables y válidos, que se ajusten a los diferentes momentos y contextualizaciones del desarrollo humano, ya que no se puede seguir considerando el conocimiento como algo acabado y completo. Es una invitación a provocar un caos organizado en el que las niñas, los niños, las y los adolescentes y jóvenes asimilen la cosmovisión de las generaciones anteriores, sus conocimientos, sus modos de ser, sus normas de conducta, se identifiquen con ellas y las acomoden en sus estructuras cognitivas para crear nuevas formas de conocimiento que den cuenta de su manera de ver e interpretar el mundo que les rodea.

[1] GARDNER, Howard. Estructuras de la mente. México: Fondo de la Cultura Económica, 1999. p. 96. Citado por: Servicio Nacional de Aprendizaje, Santander.

[2] SMITH, Robert. Learning How to Learn. New York: Harper, 1981. P. 88. Citado por: SENA, Santander.

Modelo: Diseño de una tarea académica

MODELO. “DISEÑO DE UNA TAREA ACADÉMICA”


1. Tarea diseñada por: Yaneris Isabel Varela Frías
2. Nivel educativo / curso / semestre: Educación Preescolar, grado Transición.
3. Espacio de aprendizaje: aula presencial.
4. Tipo de tarea: De comprensión
5. Finalidad de la tarea / objetivo de aprendizaje:
Leer imágenes de diferentes tipos de imágenes, ilustraciones, fotografías, dibujos y pinturas.
6. Justificación:
La lectura es un proceso de construcción de significados que el lector elabora a partir de sus saberes previos (su competencia enciclopédica), el texto y el contexto. Antes de empezar a decodificar los signos lingüísticos es importante que las niñas y los niños desarrollen su competencia semiótica, con el objeto de que puedan interpretar los signos no lingüísticos que rodean su desarrollo humano y son la base para el posterior desarrollo y adquisición del sistema alfabético.
A. Instrucciones para la tarea:
1. Exploración de conocimientos previos: Se les pedirá a los niños que describan los carteles, las imágenes que ven cuando salen a pasear por la ciudad. ¿Qué colores contiene? ¿Qué forma geométrica? ¿Tienen palabras? ¿Cómo son las palabras? ¿Hay personas? ¿Cómo son las personas? ¿Para qué es ese cartel, esa imagen?
2. Explicación del sentido de comunicación de esas imágenes.
3. Los niños compartirán con sus compañeros algunas fotografías familiares y les hablarán sobre los hechos que se evocan al verla.
4. De revistas y periódicos recortarán la imagen, ilustración o fotografía que más les guste y explicarán a sus compañeros lo que aprecian en la imagen.
5. Se motivara a los niños a desarrollar su creativa al pedirles que mediante un dibujo, que luego será pintado, expresen el cariño que sienten por su madre y su padre.
B. Producto a evaluar:
Capacidad de observación, atención, percepción, imaginación, creatividad.
Adaptación al mundo exterior.
Proceso de comunicación, comprensión y análisis.

Modelo: Diseño prueba objetiva

Examen de rendimiento escolar

Tiempo de la prueba: 60 minutos

Contenidos a evaluar:

a.    Clases de enunciados

b.    Partes de la oración

c.    Uso de la B

d.    Acento diacrítico

Trabajo cognitivo: comprensión y aplicación.

Estrategia de aplicación: La prueba se aplicará el martes 5 de junio a una población de 36 estudiantes, que cursan el séptimo grado de la educación básica secundaria durante la primera hora de clases de la jornada escolar, en su respectiva aula de clases.

Criterio de Evaluación:

a.    Asimilación y acomodación de los conceptos estudiados en las estructuras cognitivas de cada estudiante para responder los ítems elaborados.

Instrucciones generales:

a.    Prohibido prestar cualquier tipo de útil escolar (correctores, sacapuntas, borradores).

b.    Estar seguros antes de responder las preguntas, ya que esta prohibido tachar o borrar si escribe con lapicero.

c.    En la sección de comprensión lectora, marcar sólo la respuesta correcta, recuerde no se permiten borrones ni tachones.

d.    Si responde su examen con lápiz no tiene derecho a reclamos ante el docente.

e.    Tiene 60 minutos para responder la prueba.

Primera parte: comprensión de lectura.

Responda las preguntas de la 1 a la 3 con base en el siguiente texto:

El dinosaurio

Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba ahí.

Augusto Monterroso
 
1. El contenido general del texto denota, para el lector actual

a.    la admiración que un dinosaurio causa a un escritor.

b.    la advertencia del escritor sobre el tiempo del sueño.

c.    la conciencia de la vigilia que posee un mamífero.

d.    el despertar de un animal hoy en día desaparecido.

2. En la expresión el dinosaurio todavía estaba allí, la palabra subrayada puede cambiarse, sin modificar el significado por

a.    hay, ya que esta forma del verbo haber designa el estado de vigilia que el dinosaurio presentaba.

b.    ah, porque esta interjección relata la resignación que siente el dinosaurio al verse solo en el mundo.

c.    ahí, porque este adverbio de lugar indica el sitio indeterminado en donde estaba el dinosaurio.

d.    ¡ay!, pues esta interjección refiere el estado emocional de aflicción del dinosaurio por vivir solo.

3. Gramaticalmente, en las oraciones del texto se hacen presentes

a.    únicamente las frases nominales.

b.    frases nominales y frases verbales.

c.    nuevas formas de frases nominales.

d.    exclusivamente frases verbales.


Segunda parte: gramática.

Escriba V si la afirmación es verdadera o F si es falsa.

4. Los enunciados que tienen al menos una forma verbal se denominan oraciones. (      ).

5. El enunciado ¡Buenas tardes! es un ejemplo de un enunciado oracional. (      ).

6. El sujeto es el animal, cosa u objeto, persona de la que se dice algo en la oración. (      ).


Tercera parte: ortografía

Ítem de respuesta breve.

7. Lea el siguiente texto y responda porque las palabras resaltadas se escriben con B.

¿Qué buscas?, preguntó Bruno con mucha amabilidad. Nada, acabo de escribir unas cartas y estaba buscando sobres para echarlas al buzón. ¿Y tú, donde ibas tan temprano? Iba a recibir a Charo al aeropuerto, pero antes me gustaría subir y coger una bufanda porque hace un frío terrible.

Ítem de completamiento o canevá

8. Completa las oraciones con los monosílabos que aparecen entre paréntesis. Luego explique las diferencias entre estas formas diacríticas.

a.    Cayó _____ crepúsculo sin que _____, que estaba dormido, lo notara. (el, él).

b.    La monja me ha pedido que ______ mi ropa usada para los necesitados ______ los países árabes. (de, dé).

c.    El cura le dijo: "______ fuerte, que no ______ hunde el mundo por esto". (se, sé).

d.    En ese momento, el atracador se dirigió hacia ______ con expresión amenazante y me pidió todo ______ dinero. (mi, mí).

e.    No puedes negar que ______ eres mucho más mentirosa que ______ hermana. (tu, tú).

Área a evaluar: Lengua Castellana


Comprensión de lectura

Lectura Literal

Lectura Inferencial

35

Utilizar la lectura como un instrumento eficaz de conocimiento y de formación de pensamiento.

3

2

1 – 3

Gramática

Sintaxis

35

Comprender y explicar algunos aspectos de la morfosintaxis de la lengua española y aplicarlos adecuadamente en situaciones comunicativas.

2

3

4 – 6

Ortografía

Reglas ortográficas

30

Comprender las normas ortográficas para aplicarlas correctamente en los procesos de redacción de textos.

2

2

7 – 8

Ejemplo: Análisis de Caso

Análisis de Caso

Datos generales

Apellidos y nombres: Pérez Castro, Marta Isabel
Fecha de nacimiento: 3 de junio de 2001
Lugar de nacimiento: Palmar de Varela, Atlántico
Sexo: Femenino
Edad: 11 años
Dirección: Calle 44 A No 8 A Sur – 15 Barrio Ciudadela 20 de julio
Ciudad: Barranquilla
Números telefónicos: 365 2800 – 300 336 7259
Grados cursados en el colegio: ninguno
Colegio anterior: Instituto Enseñanza Moderna de Sabanalarga.
Grado actual: 6°
Fecha del estudio: 7 a 31 de marzo de 2011

Motivos de selección
Desde el inicio de su educación básica secundaria Marta Isabel ha demostrado poco interés en el aprendizaje de inglés como lengua extranjera, se ha mostrado muy pasiva y participa poco en las situaciones de habla creadas en el salón de clases. La evaluación escrita desarrollada el pasado 3 de marzo da cuenta de un proceso de desempeño bajo.
Es una de las pocas niñas que aún se muestra apática al desarrollo de su competencia comunicativa.

Características del entorno socio-familiar
Marta vive con sus padres y es la tercera hija de la relación, tiene un hermano mayor que tiene 16 años y una hermana menor de 9 años. Es una niña muy aplicada, cariñosa y solidaria que colabora en la realización de algunos quehaceres domésticos y le colabora a su hermanita ocasionalmente con el cumplimiento de sus compromisos escolares.
Su madre comenta que cuando le presta ayuda a su hermana menor, lo hace en las asignaturas de matemáticas, español, ciencias sociales y naturales, pero si tiene alguna tarea de inglés, por muy sencilla que ésta sea, se niega a colaborarle y le dice que eso es muy difícil. Para la señora es una situación preocupante porque sabe que el aprendizaje del inglés ya no es un “lujo” sino una necesidad de formación humana. Ella siempre ha querido inscribirla en el curso que ofrece el Centro Cultural Colombo Americano, pero Marta le responde siempre con negativas y le advierte que no gaste su dinero en eso porque ella no va a aprovecharlo.
Muchas de sus compañeras están en los niveles E o F del curso en esa institución educativa, y se les ve dialogando durante algunas sesiones del descanso, sin que ella muestre interés por saber qué se comunican.

Contexto próximo: el salón de clases
Revisando el último cuaderno usado por la niña en el grado anterior, proporcionado por la madre, se puede analizar que el enfoque metodológico usado por el docente en su institución era el de gramática – traducción, que la obligaba a memorizar reglas gramaticales y listados de vocabulario para estar en capacidad de traducir textos simples.
La niña comenta que la profesora cuando hablaba en inglés era para explicarles la lección y lo que tenían que hacer, cuando les colocaba la lista de vocabulario las hacia repetir muchas veces porque era muy importante que supieran hablar sin cometer errores.
En nuestra escuela, la enseñanza del inglés se orienta a partir de los principios desarrollados en el método comunicativo para que el alumno pueda usar su conocimiento del inglés en diferentes contextos comunicativos, aunque la gramática es esencial se motiva a los estudiantes a construir frases que expresen significativamente sus emociones, ideas o pensamientos y sentimientos.

Contexto amplio: la escuela
Como corresponde a esta edad esta en su etapa de desarrollo humano de la adolescencia, se percibe un mejor dominio en el desarrollo de sus procesos intelectuales (conceptualización, análisis, comprensión, entre otros), por tal razón discute durante algunas sesiones de trabajo por cosas sencillas, por ejemplos normas de convivencia, no tanto para desafiar a la autoridad sino para probar la seguridad del adulto.
En cuanto al desarrollo de su proceso académico es una chica con un desempeño alto en las asignaturas de matemáticas, ciencias sociales y naturales, pero un bajo rendimiento en lo que tiene que ver con el desarrollo de su competencia comunicativa tanto en lengua española como en lengua extranjera inglés.
Desde luego, que afecta un poco su autoimagen positiva pues le cuesta expresarse con seguridad ante sus compañeras, y piensa que se van a burlar de ella por lo que va a decir. Aunque esto no sucede con frecuencia, a las compañeras que incurren en esta falta se les pide primero que pidan disculpas y expresen lo que sentirían ellas si estuviesen en esa misma situación.

Estilo de aprendizaje de Marta
Marta es una niña que asimila muchas de las situaciones con rapidez, incorporándolas inmediatamente a sus estructuras cognitivas. Sin embargo, en cuanto al aprendizaje del idioma ingles se ha descubierto a través de diálogos y sesiones de trabajo en jornada contraria que es una chica que usa mucho el sentido de la vista para decodificar las palabras y su agrupación en estructuras gramaticales simples. Aprende mucho más rápido si esta en juego su competencia cenestésica, el hecho de usar su cuerpo, de moverse y no estar sujeta a una silla durante largos periodos de tiempo le da libertad para sentirse segura y asimilar los contenidos conceptuales o procedimentales enseñados.
Aún está en periodo de adaptación a este nuevo escenario escolar, así que le gusta trabajar sola, tampoco le gusta que el profesor la apresure para dar su respuesta, le gusta tener tiempo para pensar lo que quiere comunicar.

Nivel de competencia curricular y motivación para aprender
En respuesta a las exigencias curriculares de nuestro tiempo que entiende el conocimiento como resultado de la actividad humana de enfrentar problemas de la vida y resolverlos, y no como el acumulado informe de una actividad sin sentido que se tiene que memorizar, la escuela ha propuesto como eje de transformación pedagógica la formación docente para la aplicación del enfoque pedagógico “Enseñar para aprender” (Teaching for Understanding) desarrollado por el Proyecto Cero de la Universidad de Harvard. El trabajo pedagógico a través de los tópicos generativos, metas y desempeños de comprensión, la valoración final las y los estudiantes tendrán la posibilidad de participar conscientemente de su proceso de formación integral.
En cuanto al desarrollo de las clases se propondrán estrategias y técnicas didácticas que den cuenta del desarrollo de la competencia comunicativa a partir de los diferentes estilos de aprendizaje, se generarán espacios creativos que permitan un auténtico uso del idioma en contextos reales que tengan presentes tantos los elementos de la cultura local como aquellos que son propios de la cultura angloparlante.